lunes, 8 de octubre de 2012

LA TRAMPA

De todos lados he leído el conformismo, la decepción y la arrechera que siente el pueblo venezolano, que después de todo el esfuerzo aplicado a salir de esta mierda de ZOOcialismo, se venga a caer y rodar por el piso desfigurándose el rostro. Particularmente yo, en cierto modo, había dejado a un lado este blog para dedicar mis esfuerzos a trabajar por ver como coño se salía de esta porquería de gobierno, Venezuela necesita un cambio, pero parece que al pendejolano alpargatúo le gusta es eso: VIVIR CON EL CUELLO LLENO DE MIERDA.
Al venezolano no le importa arrodillarse o caerse a carajazos por un pedazo de comida. Muere con un bozal de arepa en la boca.
Al venezolano no le importa morir en medio de una balacera.
Al venezolano no le importa si un familiar es secuestrado, pareciera que no aprende de eso.
Al venezolano no le importa si no hay comida en los mercados.
Al venezolano no le importa si se va la luz y le fallan los servicios.
Al venezolano no le importa vivir en un refugio hacinado.
Al venezolano no le importa caer en un hueco y dejar medio tren delantero del carro.
Al venezolano no le importa si le niegan un crédito porque el sueldo mínimo no sirve para un coño.
Al venezolano no le importa si lo empujan en un charco de mierda, porque parece que se adaptó a nadar en ella.
Al venezolano no le importa si sus gobernantes tienen todo el dinero del país en sus bolsillos pero con hambre y desempleo se restean. Importante es SU AMO EL HDLGP!
Al venezolano no le importa SI LA MISIÓN en la que está metido no sirve pa una mierda, total, algo le están dando.
Al venezolano no le importa cuando un policía lo malandree y no pueda decir nada.
Al venezolano no le importa cuando su presidente no haga en 6 años lo que no hizo en 14.
Al venezolano no le importa cuando lo obliguen a marchar
 

ELLOS VOTARON  POR ESO!

Así que calémonos nuestra Venezuela tierrúa, conformista, grosera, marginal y ordinaria que quedan 6 años para ver si aprenden en 20 a usar el cerebro o terminar de volvernos esclavos de un malparido que no merece ni nombrarlo...